Nos ha sorprendido ¡Y mucho! Y no queríamos pasar por alto este restaurante de Castellón que está dando mucho que hablar desde que abrió sus puertas, en mayo de 2016. Está situado en el centro de Castellón, concretamente en el número 58 de la calle Navarra, y su oferta gastronómica sorprende y encandila a los paladares más sibaritas. ¿El culpable? Adrián Merenciano, chef y gerente del restaurante. Un joven cocinero autodidacta que hunde sus raíces en la cocina mediterránea y donde los productos de temporada son la base de todos sus platos. Platos que componen dos menús degustación: uno corto de 9 platos y el largo de 12 platos. Nosotros nos decantamos, por supuesto, por el largo y os lo queremos mostrar en imágenes. ¡Ojo! Igual cuando vayáis ya no están porque los menús van cambiando con platos diferentes constantemente. Pero, seguramente, que os sorprenderá igual que a nosotros.
Flote. Nuestra experiencia gastronómica
Como os hemos contado, nosotros nos decantamos por el menú largo: doce platos a cada cuál más original y más delicioso. El precio de este menú es de 40 €, IVA incluido. Una relación calidad precio estupenda. Eso si, la bebida no está incluida. El precio del menú corto es de 30 €, IVA incluido. Y ahora vamos al tema:
Comenzamos este viaje gastronómico con platos tan ricos como Mejillón dátil, salteados con sal y limón; Endibia, atún curado y queso feta y Navaja a la brasa con vinagreta de naranja y emulsión de tinta. Todo un lujo, y es que el chef trata los productos del mar con tanta delicadeza…Si nos tenemos que quedar con uno de ellos, sin duda, la navaja a la brasa.
Seguimos con el Pimiento relleno de queso tierno del Maeztrago; una Codorniz escabechada con verduritas y un Salmón marcado con esferas de aceite picual. Si hablamos de originalidad en la presentación del plato, nos quedamos con el pimiento relleno, con sus brasitas incandescentes y su romero y tomillo, aromas a campo. Pero hemos de reconocer que el salmón que, además, estaba aderezado con salsa teriyaki, estaba a la altura de un Estrella Michelin.
La croqueta melosa de bacalao y azafrán dio paso a un increíble arroz meloso de camarón rojo. Y es que, como elaboran los arroces en Castellón, como en ningún sitio. Hemos de reconocer que el bacalao confitado a baja temperatura con pisto en polenta y la carrillera en tempura con salsa de chile agridulce, estaban también de diez.
Y para finalizar, el toque dulce: una tarta de queso Stilton, riquísima con trocitos de queso azul. Muy original. Y no podía faltar el Pijama versión flote, un postre que en la década de los 80 y los 90 era un clásico en todos los restaurantes. Vuelta a la infancia.
Y hasta aquí este menú degustación que nos ha dejado sin palabras. Vamos a volver…Tenemos que probar nuevos platos de Adrián Merenciano. Esperamos que os haya gustado y que si reserváis mesa, nos contéis vuestra experiencia. ¿#ComemosenFlote?