En esta ocasión Dondeviajamos se desplazó al centro de Madrid para conocer de primera mano un recién inaugurado restaurante japonés con influencias europeas y del resto de Asia. Se trata de Sumo, el único restaurante nipón de la capital que ha conseguido conquistar a su clientela gracias una cocina de altos vuelos que vamos a poder degustar a un precio increíble y de una forma totalmente inusual. Si eres amante de las emociones culinarias más excitantes y eres de esos que no se pierden un pasaje a un gran viaje sensorial sigue leyendo…
A priori, Sumo prometía ya que a cargo de los fogones se encontraba Liu Jun, chino descendiente de japoneses, con una dilatada experiencia en cocinas de restaurantes de renombre como Kabuki. Sin olvidar que a cargo de la gestión de la sala se encontraba Luis Chen, con una amplia experiencia en hostelería al frente de los cinco restaurantes que forman el grupo Wok Garden, del que también es propietario. El trato amable y atento que recibimos de su parte en todo momento hizo que nos sintiéramos como en casa. Pero no sólo con nosotros si no con todos los comensales que estaban cenando en ese momento en el restaurante.
En cuanto al diseño del local no podemos dejar de mencionar el gran trabajo de Ignacio García Vinuesa, que ha conseguido en una sola planta dos ambientes totalmente diferentes y a la vez igual de acogedores. Nada más traspasar el umbral de la puerta nos da la bienvenida el «Sumo Sushi Bar», un espacio más informal que se convierte en una opción ideal para disfrutar de una gran selección de ensaladas, makis, niguiris y sushis desde 3 € incluida una bebida. A continuación se extiende el comedor del restaurante, para aquéllos que quieran sentarse a mesa y mantel y disfrutar, sin prisas, de una experiencia gastronómica única.
Y ahora le toca el turno a lo más importante: la comida. Si por algo tiene colgado «el sello de exclusividad» Sumo es, además de por sus exclusivas recetas, por la fórmula revolucionaria en el sistema para pedir los platos. Ésta consiste en en una hojita en la que figuran numerados todos los platos de la carta y con casillas a su derecha para marcar los que se deseen. Existen tres tipos de menú para los distintos días de la semana y en los que se puede pedir al camarero en 3 turnos de 6 platos cada vez, es decir, que se pueden tomar hasta un total de 18 platos. El precio de cada uno de estos menús es de 10,50 € de lunes a viernes mediodía, 14,50 € de lunes a jueves noche y 15,95 € de viernes noche a domingos.
Entre los platos que probamos de su acertada y amplia carta compuesto por 122 recetas nos impresionó el que veis en la imagen. Un increíble tartar de salmón que, según palabras de Luis Chen, cautiva a todo aquél que lo prueba. Me considero una fanática de este plato y tengo que decir que se quedó corto con sus palabras. ¡Estaba delicioso! Al igual que el resto de propuestas: Tartar de Atún, makis de mostaza y miel y makis de cebolla frita. Antes tomamos una deliciosa ensalada de algas wakame y una rica ensalada de gulas.
Llegó el turno de los platos calientes y probamos propuestas tan sugerentes como el gyu sushi de ternera, el teriyaki de solomillo, el pollo teriyaki, el wantun de queso, las alitas de pollo con coca cola y un sorprendente pollo agridulce con soja. Estaban todos riquísimos y creo que habíamos perdido la cuenta de cuántos llevábamos.
Y un nuevo repertorio de platos aterrizó en nuestra mesa. En esta ocasión se trataba de las especialidades de la casa, que no van incluidos en el menú, pero que puedes degustar por un precio muy razonable. Increíble el Nigiri erizo de mar que podeis ver en la imagen de arriba, y delicioso el Diamante, uno de las creaciones más espectaculares de Liu Jun. Otras especialidades que podrás degustar son la vieira con salsa shiso, el tataki de buey semicrudo, el sashimi de toro o las gambas con curry japonés, entre otras.
Dejar hueco para el postre era obligado. Cómo no íbamos a probar el yukimi, un postre típico japonés que consiste en una bola de helado recubierta con pastel de arroz. Aunque he de decir que la tarta de nata no se quedaba atrás. La próxima vez que visite Sumo no dejaré escapar el brownie, la tarta de manzana y los profiteroles.
La carta de vinos comprende más de treinta referencias , entre tintos, blancos, rosados y espumosos. Nosotros maridamos la comida con un Rueda Martín Berasategui. Muy acertada la elección de este vino, fruto de la unión entre el gran cocinero vasco con 7 estrellas Michelín, y Juan Ignacio Belasco. En la carta también encontraremos el tradicional sake japonés y el selecto Sake Takara Mío, que en Japón se bebe como si se tratara de Champagne.
Hasta aquí nuestro viaje gastronómico al País del Sol Naciente. Volveremos por muchos motivos: Queremos degustar de nuevo el exquisito Tartar de Salmón. Tenemos que probar otras delicatessen, que aún nos quedan muchas… Nos ha encantado la originalidad y la exclusividad de algunas de las recetas de su extensa carta. Nos ha sorprendido el precio de esta cocina de altos vuelos.¡Apta para todos los bolsillos! Y sobre todo, volveremos por el increíble trato del servicio.
¿Dónde?
SUMO
C/ Fuencarral nº 116. Madrid
Teléfono de Reservas: 91 086 44 97
Horarios: De domingo a Jueves 13.00 hs a 00.30 hs
Viernes, Sábados y festivos 13.00 hs a 01.00 hs
Horario Sushi Bar: 16.30 hs a 19.30 hs
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