Se ha convertido en todo un líder mediático gracias a sus apariciones televisivas en programas como Pesadilla en la Cocina y Top Chef. Ha sido chef de restaurantes brillantes como el desaparecido NODO y PandeLujo. Ha recibido diversos premios como reconocimiento al mejor cocinero. Y ahora, afronta un nuevo reto con la apertura de un espacio rompedor y original, inspirado en la clásica taberna japonesa. Hablamos de Chicote y su nueva propuesta gastronómica que dará mucho que hablar en el 2014: Yakitoro.
Un yakitori es una brocheta de pollo a la brasa, también conocida como kushiyaki. El yakitori tradicional consistía únicamente en piezas de pollo y verduras pero actualmente se elaboran también con otro tipo de carnes, verduras y pescados. Esta comida, típica de los puestos callejeros y de las tabernas japonesas, pero adaptada a la cocina española , es lo que vamos a encontrar en Yakitoro.
Las raciones de Yakitoro son pequeñas y los precios son bastante ajustados, entre 2,5 € y 6 €. Es una forma de probar varias especialidades de la carta por un módico precio. Eso si, no nos engañemos ya que si eres de buen comer y no quieres quedarte con hambre, la cuenta final puede subir un poco más de lo esperado.
Nosotros decidimos comenzar nuestro festín con una brocheta de atún rojo y pack choy lacado sobre pan y salmorejo. Sin duda, fue el plato más impresionante de todos los que probamos aunque también tengo que decir que fue el más caro ya que solamente incluía una brocheta. Os dejo una foto para que podáis apreciarlo.
Seguimos con unas setas shitakes frescas, salsa de ajo cocido y virutas de bonito seco ahumado. Este plato, que solamente cuesta 3,20 € , también nos gustó mucho. No sé si influirá que soy una amante de las setas y entre ellas las shitakes.
Las albóndigas picantes de pollo lacadas, un delicioso cordero marinado en yogur y hierbas y un sencillo pero exquisito arroz salteado con ajo y atún de la mejor lata, completaron nuestra comida. La guinda final la ponía un rico postre que consistía en un helado de fresa y wasabi, crema de chocolate y galleta de jengibre. ¡Estaba espectacular!
Y si la cocina de Yakitoro sorprende, otro de los puntos que no deja indiferente es el ambiente. Nada más entrar llama mucho la atención las originales mesas que tienen un hueco en el centro lleno de hielo para que las bebidas no se calienten. Las mesas están juntas pero no podemos olvidar que se trata de una taberna, no de un restaurante. Eso si, si eres de los que te gusta la intimidad mientras cenas, Yakitoro no es tu sitio. Y en medio del local, la cocina en directo al carbón, a la vista de todos los comensales.
Está claro que han cuidado hasta el mínimo detalle. Una pena que el día que fuimos el servicio no estuvo a la altura. No sé si influiría el hecho de que el local estaba lleno y eso que era un martes a mediodía. Lo cierto es que estaban desbordados y los platos tardaron bastante en salir. Igualmente ocurrió con la bebida.
Yakitoro se encuentra en pleno centro de Madrid, a escasos metros de la Gran Vía, en uno de los barrios con más auge de la capital, que esconde una variada oferta gastronómica. El precio es de unos 25 € aunque si te decantas por un menú largo puede costar alrededor de unos 35 €.
