El restaurante de moda en Ponzano tiene nombre y apellidos: Toque de Sal

Un restaurante tan elegante como Toque de Sal no podía elegir otra ubicación que no fuera Ponzano, la calle gastronómica de moda en Madrid. Con muy pocos meses de vida, este espacio decorado al estilo de los bistró paraisinos de toda la vida y con una carta donde abundan los platos exquisitos, ya se ha convertido en todo un referente entre los foodies de la capital.

La decoración del restaurante, obra del arquitecto Alvaro Oliver Bultó, es de esas que deja a todos con la boca abierta. No es de extrañar que los fines de semana la zona de la barra, con un gran ventanal a la calle y una espectacular vitrina de quesos, sea un gran reclamo para los mortales que no nos perdemos la hora del aperitivo. Al fondo, una pequeño y coqueto salón-comedor, con sus maleteros de latón, nos traslada de un plumazo a un vagón de un tren de época de principios del siglo pasado.

La carta, exquisita y apetecible de principio a fin, nos sorprendió con recetas de toda la vida con un pequeño toque francés. Disfrutamos de lo lindo con entrantes tan ricos y originales como los Chupa Chups de Codorniz con salsa Pekin y los Mejillones a la Belga acompañados de sus ricas patatas. ¿Sabías que las patatas belgas son las mejores del mundo? Dos platos de diez. Nos quedamos con ganas de probar los Fetuccini Negro con Carabinero. La próxima vez…

Las ensaladas, frescas y originales, como la de perdiz en escabeche o pollo trufado, dan paso a los platos principales de la carta. Bocados deliciosos como las Albóndigas Riad Abracadabra, el rabo de toro o el clásico Steak Tartar que, por cierto, estaba riquísimo, harán las delicias de los más carnívoros. Y en cuanto a pescados, no dejes de pedir el Ceviche de Corvina. ¡De matrícula de honor!

El toque dulce lo ponen postres como la Vaca Lechera, la tarta de manzana o el Mousse de Chocolate al Toque de Sal, haciendo honor al nombre del local. Nos encantó la mezcla de la sal con la cremosidad del chocolate. Muy recomendable. Y todo esto regado con Valtravieso, un Ribera del Duero muy rico que nos recomendó Eduardo Rodríguez.

El trato cercano sumado a una cocina exquisita, hacen de Toque de Sal uno de esos lugares imprescindibles para una ocasión especial. Volveremos pronto a probar nuevos platos pero, mientras tanto, recordaremos en nuestro paladar el sabor del Ceviche de Corvina. Nos quedamos con una tarjetita y la guardamos en el cajón de “favoritos”.

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Dónde

Toque de Sal

C/ Ponzano, nº 46

Teléfono de reservas: 91 426 64 65

Horario: De lunes a domingo de 08.30 hs a 00.30 hs, y hasta 02.30 hs los jueves, viernes y sábados.

Precio medio a  la carta: 30 €

 

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