Estamos de estreno, el nuevo italiano del Grupo Ottica acaba de abrir en el número 3 de la calle Padre Claret, con una propuesta que va a enamorar a los amantes de la cucina tradizionale italiana. Un restaurante que rebosa frescura y tradición en estado puro. Una vez más, Eduardo Morán e Ignacio Martín Tabares, han dado con la fórmula mágica para triunfar en el negocio de la hostelería. Y a los ya exitosos Ottica Restaurante, Occhiali Restaurante y su reciente apertura de La Lupa Restaurante, se une el hermano italiano “Ottilia Ristobar”.
Todos los locales del Grupo Ottica tienen como denominador común el éxito, sin duda porque cumplen con todo lo que casi todos buscamos cuando salimos a comer, cenar o tomar algo: comer bien y ser bien atendidos, producto de calidad a un precio asequible, variedad, buena ubicación, una decoración bonita (que en este grupo es más que bonita, porque son todos ideales), y detalles que marcan la diferencia.
Con una carta 100% italiana con producto fresco, pastas y pizzas caseras en todas sus versiones, la elección es bastante difícil porque apetece todo. Para comenzar no te puedes perder las Arancini Ottilia, unas deliciosas croquetas de arroz con boletus y mozarella; la Burrata affumicata, una burrata ahumada con una finísima capa de masa frita, sobre tartar de salmón, con crema de aguacate y tomate rosa o su Carpaccio di gamberi rossi. Un espectacular carpaccio de gamba roja flameado, espuma de limón con duo de pesto.
Para seguir, una selección de más de diez pizzas de fermentación larga y alta hidratación, estrellas del restaurante, donde además de las clásicas, encontramos la de jamón de parma y queso de cabra, la blanca de gorgonzola con espinacas y nueces, o la negra con crema de anchoas, entre otras. ¿Nuestra favorita? La Pizza a´soretta, con tomate, fior di latte, guindilla, gorgonzola y al salir del horno, carpaccio de solomillo y lascas de parmigiano.
En los principales, vas a caer rendido ante sus Raviolis de higos y gorgonzola con un medallón de conejo en su caldo o ante su pasta fresca con carbonara trufada. Además, Solomillo de ternera con salsa de trompetas de la muerte y patata al horno, lomo de salmón en mantequilla de salvia con salsa de naranja al romero y arroz venere con setas, y rollito de pollo relleno de espinaca y ricota, entre otros.
Si o si hay que dejar hueco para el postre y probar delicias como la Zuppa inglese, elaborada con soletillas con licor de alchermes, confitura de frutos rojos y crema pastelera con topping de migas de crumble.
En cuanto a la decoración, esta vez la preciosa puesta en escena es mérito de Isabel Aparicio y Fernanda Pire. Ambas han conseguido crear un espacio para el disfrute de la comida y de la charla que te transporta a una casa de campo familiar. El local dividido en tres ambientes, está presidido por un colorido y luminoso gran salón central con una barra, que hace de hilo conductor entre la zona del horno de pizzas más informal y el resto de la gran sala. La barra revestida con azulejos muy coloristas te conduce hacia la zona del restaurante donde el ambiente es más tranquilo y cálido por los tonos sienas y verdes que hacen referencia a los pueblos del sur de Italia. La luz indirecta permite conseguir un espacio más acogedor y confortable. Y al fondo del local, el reservado ambientado con suelo hidráulico, banco tapizado en tela de cuadros, madera, rafia y vegetación.
Ottilia Ristobar (c/Padre Claret, 3), abre todos los días de la semana, lunes de 09:00 a 17:00 horas, de martes a jueves de 09:00 a 00:00 horas, viernes de 09:00 a 02:00 horas, sábados de 12:00 a 02:00 horas y domingos de 12:00 a 17:00 horas. El precio medio es de 25-30 €. De lunes a viernes al mediodía, cuenta con un menú por 13,90 €, que incluye un primero y un segundo a elegir entre tres opciones, pan, una bebida, postre y café. Se puede ampliar información y reservas en el teléfono 91 931 68 93 y en su web www.ottiliaristobar.com