Lo mejor que nos trae la Semana Santa son, sin duda, las torrijas. Son el plato estrella de estas fechas. Y es que ¿quién es capaz de resistirse al delicado sabor de este dulce, con sus aromas a canela, azúcar y leche? Además, son muy fáciles de elaborar ya que se utilizan ingredientes muy sencillos. Y aunque recetas hay muchas, esta receta de torrijas caseras que os dejo es la de toda la vida, la que se comía en casa de mi abuela y, después, en la de mi madre.
Pero antes de meternos en faena y ponernos con ello, un poco de historia. ¿Sabías que la torrija nació en el siglo XV en un convento y desde entonces quedó muy ligada a la Cuaresma y a la Semana Santa porque, precisamente, en un periodo en el que los católicos no podían consumir carne, su apariencia se asemejaba bastante a la de la carne asada? Lo que está claro es que las torrijas eran un plato de aprovechamiento que en sus orígenes se preparaba con el pan duro que sobraba en las casas. Ahora, casi todo el mundo prepara las torrijas con un pan creado para este fin. Puedes encontrarlo en cualquier supermercado.
Elaboración:
Ponemos a calentar en un cazo leche, azúcar y una rama de canela. Podemos añadir (depende del gusto del gusto de cada uno, si prefiere las torrijas más aromatizadas) una cáscara de naranja y de limón.
Mientras la leche se calienta, podemos partir el pan para torrijas (si no vienen partidas) en rodajas de dos centímetros de espesor. A continuación las remojamos en la infusión que hemos preparado durante unos segundos, de manera que queden bien impregnadas y las dejamos reposar durante una hora.
Ponemos a calentar abundante aceite de girasol en una sartén y freímos las rebanadas de pan pasadas previamente por huevo batido. Al sacarlas, las ponemos sobre papel absorbente para que no queden grasientas.
Una vez se haya absorbido todo el aceite, rebozamos de nuevo las torrijas en una mezcla elaborada con azúcar moreno y canela. Para finalizar, hacemos un jarabe con lo que ha quedado de la leche y bañamos la torrija.
Si prefieres aligerar esta receta de torrijas caseras, puedes hacerlas en el horno. De esta manera ahorrarás un montón de calorías.
Torrijas mi época favorita.
Ji, ji!! Están tan ricas!