Si existe un producto ligado a Badajoz y a Extremadura, a su dehesa, a su cultura y a su gastronomía es, sin duda, el jamón ibérico. En torno a este producto, único en el mundo, se puede realizar una escapada muy especial por la provincia de Badajoz en la que descubrir todo un mundo de sensaciones a través de una propuesta turística que articula actividades y experiencias singulares a su alrededor: la Ruta del Jamón Ibérico Dehesa de Extremadura.
Una visita a la Ruta del Jamón descubrirá pueblos que cuentan con un rico patrimonio fruto del paso de distintas civilizaciones, con sorprendentes cascos urbanos y castillos que transportan al viajero a tiempos de caballeros y órdenes militares. Buen ejemplo de ello es Fregenal de la Sierra con su impresionante Castillo Templario; Jerez de los Caballeros, ciudad templaria y cuna de grandes conquistadores como Vasco Núñez de Balboa; Zafra, conocida como “Sevilla la Chica”, debido a su gran riqueza monumental; Llerena, Monesterio, Higuera la Real, Azuaga, Feria, Fuentes de León, Oliva de la Frontera, Almendralejo, Hornachos y Olivenza son algunos de los enclaves de la Ruta.
La visita a los museos y centros de interpretación en torno al jamón, al cerdo ibérico y a la dehesa adentrará al viajero en toda la cultura que rodea a este producto, la pureza de su raza y su hábitat, las tradiciones y los métodos de elaboración, así como un mundo de curiosidades por descubrir.
Los secaderos y bodegas de jamones y embutidos ibéricos abren también sus puertas para mostrar los métodos más tradicionales de elaboración y la más alta tecnología que se incorpora hoy en día a los procesos productos. Mientras, las mesas de sus restaurantes sorprenden no sólo con el mejor jamón ibérico de bellota, sino con toda una gama de productos ibéricos y la diversidad gastronómica que ofrece la dehesa, con productos como setas, espárragos, frutos silvestres, cordero y ternera, entre otros.
Junto a ello, todo tipo de experiencias singulares, que van desde los cursos de corte de jamón a las catas maridadas y por supuesto, degustaciones, así como talleres de cocina e incluso actividades en el entorno a la dehesa.
Además, merece la pena participar en fiestas y tradiciones relacionadas con la cultura del ibérico, como el Día del Jamón de Monesterio, declarado de Interés Turístico de Extremadura, la Matanza Didáctica de Llerena, la Feria del Jamón Ibérico de Fuentes de León, y el Salón del Jamón Ibérico de Jerez de los Caballeros.
La provincia de Badajoz es tierra de dehesa, de olivares, de viñedos, de cultivo…y que dan lugar a excelentes productos gastronómicos que pondrán el broche a cualquier viaje: el aceite de oliva virgen Denominación de Origen de Monterrubio, el queso Denominación de Origen La Serena, la excelentes carnes del cerdo ibérico, así como las de Indicación Geográfica Protegida de Cordero de Extremadura y de Ternera de Extremadura. Delicias que, junto a los vinos que nos brinda la Denominación de Origen Ribera del Guadiana, conforman una amplia carta de sabores que no dejarán a nadie indiferente.