IZTAC. El México más desconocido en Madrid

Hoy nos toca viajar con los sentidos a México, a un lugar con magia para disfrutar sin prisas de una sabrosa cocina. Así es Iztac, un templo gastronómico que atesora la esencia de México y que se ha propuesto darle gusto a tu paladar. ¿Cómo? Pues a través de una cocina elegante, sorprendente, alejada de clichés y que recoge los sabores más puros de este bello país. Hoy nos volvemos más viajeros que nunca… ¿Te apuntas?

Un pedacito de México en el madrileño barrio de Bernabéu, en el mismo espacio en el que en 1959 se inauguró México Lindo, primer restaurante mexicano de Madrid y que evoca rincones muy especiales del país azteca. Esto es lo que ha conseguido representar el estudio de arquitectura Free Hand. Una estética minimalista, refinada que huye de estereotipos a través de colores en tonos neutros, luz, vegetación, madera y los lienzos realizados por el artista Gabriel Moreno. Lienzos que narran la maravillosa leyenda del Popo y el Iztac (de ahí el nombre del restaurante), los dos grandes volcanes que se admiran desde la ciudad de México.

Todo en conjunto convierten a Iztac en un lugar para quedarse todo el día disfrutando de platos inspirados en ingredientes basados en productos naturales de la huerta, en recetas de antepasados, en pueblos de un territorio que hay que descubrir.

Iztac. Un recorrido por las diferentes gastronomías de la República de México

No hay más que echar un vistazo a la carta para darnos cuenta de que la comida mexicana es una de las más reconocidas del mundo y su variedad de platillos es infinita. Aquí no esperes encontrar tacos, quesadillas o nachos ya que la carta recorre desde el noroeste en Baja California hasta el suroeste en Quintana Roo en forma de recetas caseras auténticas. De Sonora procede el Mochomo, un suculento vacío de ternera, cocinado lentamente para obtener finas hebras que, después, son fritas para dejarlas crujientes y acompañarlas de una salsa de aguacate y salsa tarahumara. En Guanajuato se utiliza el tuétano, ingrediente principal de la Memela, bandera con Tuétano. Una deliciosa tortilla bicolor ovalada a mano (maíz azul y amarillo), cocinada con un poco de manteca y untada de salsa roja y verde, con queso, cebolla, torrezno y frijoles. Y acompañada de un jugoso tuétano a la brasa. De 10. ¿Y de Chiapas? El Cochinito Chiapaneco, un delicioso plato de crujiente lechón, salseado de un adobo Chiapaneco, con puré de frijoles y arroz rojo.

Mochomo - Iztac - Restaurante mexicano — Mochomo

También encontramos en la carta «platillos criollos» como el Huachinango a la Veracruzana, un plato que refleja las influencias gastronómicas vizcaínas combinadas con la variedad de productos de las costas del Golfo de México. Un plato que nos habla de las raíces de Jorge (alma máter de Iztac), que nos habla de cuando sus abuelos tuvieron que emigrar a México y montaron una tienda de ultramarinos donde lo que más se vendía era el bacalao. Muy rico este plato.

Y cómo no podía ser de otra manera, el mole ocupa un lugar destacado en la carta por ser uno de los platillos más representativos de México ¿Sabías que hay más de 200 moles distintos? Pues en Iztac los elaboran a diario y se convierte en ingrediente estrella de recetas tan ricas como la Enchilada de Mole, un plato que, como el anterior, reúne un mestizaje gastronómico. Técnicas e ingredientes mexicanos y condimentos europeo que dan lugar a unas deliciosas enchiladas rellenas de pato confitado, bañadas en tradicional mole de más de 32 ingredientes. Para mi, uno de los platos que más me gustaron.

Enchiladas mole rellenas de pato confitado

Y aún hay más…platillos típicos callejeros mexicanos que, a priori, no te van a llamar la atención pero no debes dejar de probarlos. ¿Entre ellos? Esquites, una mazorca blanca hervida y aromatizada con epazote, acompañada de mayonesa picante y queso fresco. Y, por supuesto, el Guacamole de Iztac, que es «pura mantequilla mexicana». Aguacate molcajeteado, con cilantro, tomate, cebolla y chile verde. Y algo más…Torreznos de Soria para decorar. Sobresaliente.

¿Y para acompañar esta sabrosa gastronomía? Una amplia propuesta de coctelería en la que no puede faltar las micheladas, una buena lista de mezcales y uno de los grandes clásicos de la cultura mexicana, los margaritas.